Redacción/ Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 06 de noviembre de 2022. – Al menos 800 mujeres jornaleras y hombres jornaleros de la comunidad indígena nahua de Ayotzinapa, municipio de Tlapa de Comonfort, en la Montaña Alta de Guerrero, se preparan para emigrar a los estados de Sinaloa y Guanajuato para trabajar en los campos agrícolas durante seis meses.
Las familias, entre cuyos integrantes se encuentran niñas y niños, algunos de ellos todavía bebés, salieron en camionetas particulares de su pueblo hacia el crucero de su pueblo, donde ya los esperaban 14 autobuses de la empresa agrícola Golden Fields.
Enseguida, se los llevarían a la Unidad de Servicios Integrales (USI), mejor conocida como la Casa del Jornalero, en la cabecera municipal de Tlapa, donde les darían alojamiento por un rato, registrarían, proporcionarían víveres y por la tarde finalmente serían llevados a los campos en la ciudad de Costa Rica, municipio de Culiacán.
De acuerdo con Paulino Rodríguez, del Consejo del Jornalero Agrícola de la Montaña, las familias siguen estando olvidadas por los tres niveles de gobierno, especialmente por la Secretaría de Asuntos Indígenas y Comunidades Afromexicanas (Saica) del estado.
Precisó que aparte de no darles acompañamiento, no apoyan a la USI donde llegan, de modo que no cuentan con la infraestructura adecuada, los servicios básicos como agua, luz, recolección de basura y carece de víveres para alimentar a las personas.
Ante ello, llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador, a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y al alcalde de Tlapa, Gilberto Solano Arriaga, así como a sus instituciones, a que “volteen a ver” a los jornaleros.