Redacción/Samuel Mendoza
El Obispo Emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, afirmó que perdonará a las personas que lo revictimizaron luego de haber sido víctima de un presunto secuestro exprés.
El religioso se pronunció en torno al caso que lo envolvió en una polémica hace cerca de diez días, tras haber hecho una reflexión, dijo con su familia cómo con el clero como con laicos.
Aunque su salud física está en condiciones desfavorables afirmó que perdona a las personas que le hicieron daño.
“Siguiendo los principios evangélicos de nuestro Señor Jesucristo, perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación”, dice el escrito difundido este miércoles.
El obispo también aseguró que no presentará denuncias y pidió a los medios de comunicación su comprensión para no dar declaraciones públicas por el caso.
Salvador Rangel fue reportado como desparecido el pasado viernes 26 de abril cuando se trasladó de Jiutepec hacia Chilpancingo; la noticia fue confirmada tres días después por la Conferencia del Episcopado Mexicano.
Rangel Mendoza fue hallado en un hotel golpeado y bajo los efectos de una droga víctima de un presunto secuestro exprés, de acuerdo al fiscal de Morelos.