**Lleva 45 años de búsqueda, no descansará hasta encontrarla
Texto: Yasmín García Chino
Fotografía: Oscar Guerrero
Gregorio Fernández Brito desde hace 45 años busca a su hermana Victoria Hernández Brito, el 11 de octubre de 1976 militares encabezados por el General del Ejército Mexicano, Mario Arturo Acosta Chaparro (asesinado en la Ciudad de México en el año 2012), irrumpieron en el domicilio de los padres de Victoria y se la llevaron, ubicado en la Calle Rayón con el número 24 en la ciudad de Iguala de la Independencia.
Victoria Hernández Brito tenía 25 años de edad, estudiaba en la Escuela Superior de Agricultura, era integrante del movimiento estudiantil que exigía la apertura de su escuela, cerrada en 1975 por el entonces gobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Figueroa por el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
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El 10 de octubre de 1976, un día antes de su desaparición, la joven estuvo en la Ciudad de México, protestando afuera de las instalaciones de Gobernación Federal, para exigir la apertura y entrega de las instalaciones de la Escuela Superior de Agricultura.
“Desde el cierre de la escuela por parte de Rubén Figueroa, mi hermana Victoria se dedicó a protestar, y un día antes de que se la llevaran y desaparecieran estuvo en la Ciudad de México, luchando porque la volvieran a abrir, ese fue el motivo por el que se la llevaron”. Relata su hermano Gregorio Fernández Brito.
A sus 85 años Gregorio no ha dejado de buscar a su hermana, la mañana del domingo asistió a la marcha contra el ejército y fuerza área por su participación en la desaparición, asesinatos y torturas en el época de 1970.

A las 6 de la mañana salió de Taxco, ciudad en la que ahora radica, para llegar a Chilpancingo, marchar por la Autopista del Sol y protestar en las instalaciones del sexto batallón de ingenieros de combate en donde la gobernadora del estado Evelyn Salgado Pineda asistió como invitada a la ceremonia conmemorativa por el 110 aniversario del Ejército Mexicano.
Gregorio no puede caminar distancias largas se apoya de un bastón con un asiento plegable para poder descansar durante las marchas, hace algunos meses se cayo y se fracturo la pierna, sin embargo, no es impedimento para que deje de buscar a su hermana.
“Yo no pierdo la esperanza de encontrarla, no voy a aceptar que el gobierno me diga que no aparece, voy a buscarla para encontrarla, porque viva se la llevaron y viva la queremos”. Enfatizó mientras permanece sentado en el asiento plegable de su bastón.